jueves, 30 de diciembre de 2010

Impresiones, percepciones... ¡Cuidado, tu cerebro te engaña!

Buenas tardes gente de bien

Zzzzz, Zzzzz
Ayer me acosté muy tarde y la noche ha sido de muy mal dormir. Y, a pesar de estar de vacaciones, he tenido que madrugar por motivos culinarios. Por eso, cuando la inevitable somnolencia ha atacado mi persona tras acabar la, dicho sea de paso, deliciosa comida y aprovechando que estoy de vacaciones, he decidido permitirme el lujo de echar un sueñecito. Cuando me he despertado ha sido como una de esas veces que parece que sigues dormido. Los sonidos, las imágenes... todo era un poco difuso, como irreal. Así que me he puesto a ver un programita de Redes, "pa despejarme" : )) Hoy ha caído este:


Abre tu meeeeente
No soy uno de esos fans de Punset a quien todo lo que dice le parece una realidad a pies juntillas. No, me considero alguien con espíritu crítico y suelo buscar información para contrastarla y poder tener una opinión al respecto. Dáse la casualidad de que el tema de este programa es algo sobre lo que he leído cosas y creo que es bastante acertado.

Para quien no tenga el tiempo de verlo (28 minutos) le diré que lo saque de donde sea jajaja. No, venga, haré un resumen resumido:

Viene a decir que la parte subconsciente de nuestro cerebro tiende a amoldar, tergiversar o modificar los recuerdos de forma que nos beneficie. Eso explicaría por qué solemos recordar más lo bueno que lo malo de las personas o vivencias. Es decir, que se trata de supervivencia (y, dentro de sobrevivir está el grado máximo: vivir lo mejor posible). Vamos, que el cerebrito es un pequeño cabroncete con ganas de que tú estés contento (cosa de la que me alegro, por otro lado).

En un sentido más amplio, esos recuerdos y reacciones programadas en el cerebro nos llevan a crear prejuicios y a sentar bases que, muchas veces no responden a criterios racionales. Es lógico teniendo en cuenta que, sobre todo al principio, carecemos de la información necesaria para evaluar una situación, persona o experiencia. No respondemos a criterios estadísticos o analíticos, más propios del cerebro racional. También es cierto que, de no contar con ese cerebro rápido erraríamos mucho más.

Luego el reportaje ahonda un poco en estos temas y en lo que derivan: prejuicios en miedos, miedos en agresividad, agresividad en enfrentamientos... incluso habla un rato de guerras con un testimonio de Jon Sistiaga bastante emocionante. Ahí ya se pierde un poco en hacer el reportaje más dramático.

Todo para hacer ver al "internetvidente" (habrá que pensar en un término así, ¿no?) que hay que tener presente siempre que uno no se puede fiar de sus percepciones, de lo que su cerebro le dice. Al menos, que no se puede fiar siempre. Que hay que guardar siempre una carta para jugarla pensando que eso que uno percibe puede ser fruto de muchas cosas en la propia mente (recuerdos, experiencias traumáticas o positivas, culturales, aprendidas...). Me hace gracia la anécdota de Cordelia Fine sobre el teatro. Considero importantísimo ese espírituo autocrítico de decir: "¡Ostrás! ¿esto será cosa mía o de los otros?". Eso que ella llama el realismo ingénuo, que al fin y al cabo es un comportamiento infantil (y, por tanto, se da en la mayoría de adultos : )) ). Citando a Cordelia: "La gente siempre tiene prejuicios interesados sobre sí mismos. Y cuando les preguntas sobre otros te dicen: Bueno, sí, hay gente que hace eso. Pero, y ¿tú lo harías?. No, yo no".

Me ha venido a la mente la entrada sobre propósitos de enmienda de la gran Lorena : )) y lo de los 21 días para automatizarlos. Y pienso en el cuidado que hay que tener con las primeras impresiones y con los posibles engaños del cerebro. 

Y todo este rollo, para deciros que todas las cosas que voy publicando por aquí sobre la gente que veo y cuya vida y circunstancias suelo imaginar (e inventar) es sólo eso, fruto de mi alocado cerebro buscando respuestas a las millones de preguntas que me surgen. Así pues, téngase en cuenta cuando se lea, que lo que aquí se pretende es dar rienda suelta (y escrita) a estas elucubraciones para ejercitar el cabezo y, de paso, reirnos un rato. Y así uno es más consciente de que su cerebro es un pillo con ganas de tomarle el pelo :)

Por cierto... que ya es casi viernessssssssss

7 comentarios:

  1. El tema del cerebro y las percepciones es muy interesante.
    No he podido ver el programa de Redes, pero la verdad es que es un tema que me llama mucho.

    Tú te centras en como el cerebro tiende a tergiversar los eventos vividos, quedándose con lo bueno, pero también es muy interesante como nos engaña en las percepciones más simples, por la manía que tiene a veces de completar lo que recibe quedándose con los esquemas predefinidos que le son más habituales (economía de esfuerzos), y por jugar en otros casos a definir nuestra sensación por contraste de percepciones (otra vez economía de esfuerzos aplicada a la fisiología de la visión).
    Échale un vistazo al blog + Infinito +, sobre todo a su etiqueta "Ejercicios Mentales", y verás la multitud de ejemplos de confusión de percepción que tiene.

    Solo una cosa más: estoy muy de acuerdo con la afirmación de que nuestro cerebro se queda con lo que le beneficia. Pero no con la de que por eso solemos recordar las cosas buenas de las vivencias o de las personas que conocemos. De hecho, en muchas ocasiones, solo recordamos lo malo precisamente por la afirmación anterior: porque nos beneficia.
    Así olvidamos más rápido a algunas exparejas, o nos centramos en protegernos cuando nos sucede algo malo en el pasado. Relativizar suele ser un buen ejercicio mental, no solo moral...

    Igual lo has leído, si no quizás pueda interesarte leer a Nassim Nicholas Taleb.
    Parte de su filosofía sobre los cisnes negros tiene que ver con como nuestro cerebro nos predispone a determinados esquemas mentales. ¡¡¡Necesitamos esos esquemas, necesitamos amoldar las cosas a teorías, necesitamos pensar que "dominamos" la situación!!!

    El ser humano mola...

    Saludos.

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  2. Hola oligoqueto

    No era mi intención decir que el cerebro sólo se queda con lo bueno. La idea es que se queda con "lo que le conviene" y eso a veces será lo que consideramos generalmente bueno (un abrazo, una experiencia bonita) o puede que no. Siento si me he expresado mal.

    Por lo demás, completamente de acuerdo: la economía de esfuerzos tiene que ver con los 21 días ;-)

    Gracias por el enlace al blog :) y por la recomendación de Taleb.

    Y sí, el ser humano mola :)) Sobre todo, si lo usas bien.

    un brazoooo

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  3. Por cierto, que el enlace de +Infinito+ estaba incorrecto. Este es el bueno:

    http://infinito-cyllan.blogspot.com/

    Slaudos

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  4. Totalmente de acuerdo en que somos un montón de recuerdos ordenados para nuestro mayor beneficio.
    Tengo el inmenso placer desde hace algo más de cuatro años de ver cómo crece una persona y como evoluciona y es impresionante las reacciones que tiene un bebé a ciertos estímulos y lo sencillo que resulta canalizar la actitud.
    Mi hijo jamás se enfada. Eso dice él, porque papá le explicó que enfadarse le lleva al lado oscuro de la Fuerza (y eso que no ha visto Star Wars aún). Eso a cuento de lo que comentas de Cordelia Fine.
    Y después del comentario de oligoqueto y tu aclaración no puedo decir más que chapeau et au revoir mes amis.

    Feliz año y que sigamos tomando muchos cafés en 2011, sea con wifi pública o privada.

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  5. Hola Alejandro

    y que lo digas, tú lo estás viviendo en primerísima persona. Apreciando las reacciones, cómo se desarrollan los procesos cognitivos. Buf! y tu influyes directa e importantísimamente sobre ello... Te admiro, menuda responsabilidad!

    Un brazo!

    P.D. La cafetería no cierra y me han traído un café colombiano que ya verás!!! :)

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  6. Y menos mal que ordena los recuerdos en nuestro mayor beneficio, aúnque a veces nos autoengañe un poquitín, así la aventura de la vida es un poco más llevadera...

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  7. Hola estonoesunblogdehistoria

    Cierto... y más divertida también :)

    un brazo

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un saludo y gracias!