viernes, 28 de enero de 2011

No trates como prioridad a quien te trata como opción

¿Qué os parece la frasecita?

Últimamente la veo mucho como acompañamiento de nicks de messenger. Y se la veo a chicas. Concretamente a 3 chicas que, sin conocerse entre ellas, tienen muchas cosas en común. Son chicas normalitas, que podrían clasificarse como "del montón" (en el sentido más gaussiano de la expresión). Chicas que nunca destacaron especialmente en nada, aunque se apuntaran a todo :) Apenas tengo relación con ninguna de ellas, pero voy sabiendo de sus vidas por amistades comunes. Ninguna de ellas es un bellezón, pero tampoco llaman la atención por ser especialmente feas (se puede escribir esto sin ofender a nadie, ¿verdad?).

En fin, que me pregunto yo qué les habrá pasado para poner esta frasecita y querer compartirla con todos sus contactos. Porque, evidentemente, cuando uno pone cositas de este tipo en cualquier red social, está pregonando a los cuatro vientos un evento. Más o menos críptico, el mensaje viene a decir "quiero que sepais esto". Pero ese es otro tema sobre el que ya se ha escrito.
Como digo, con estas chicas he perdido relación por diferentes motivos (alguna de ellas era la típica amistad veraniega que... se queda en eso), pero me imagino que habrán topado con un tipo del que se habrán enamorado perdidamente y que únicamente las tenía para echar un... rato. Y les habrá partido el alma. Y me indigna, y me da pena. Porque son chicas estupendas. Vale que no sean top models, pero son personas valiosísimas. Y se han llevado un batacazo (alguna de ellas lleva con la frasecita años).

Pero lo peor no es eso. Lo peligroso del asunto es el efecto rebote. Que ellas (chicas inteligentes que son las 3) aprendan de la experiencia y decidan no volver a meterse en esos berenjenales. Y aquí pueden pasar dos cosas (así, grosso modo):
- que el efecto rebote les dure un tiempo. Casualidades de la vida, en ese periodo seguro (y me podría jugar un pié a) que aparece un chico maravilloso, atento, detallista, estupendo y que las quiera con locura. Y ellas, en pleno efecto rebote, le harán sufrir lo indecible (puede que sin querer o intencionadamente). Este chico sufrirá un nuevo efecto rebote y lo pagará con otra chica y vuelta a empezar.
- que sea permanente. Y aquí viene la catástrofe. Esto va en función (creo) de lo analítica que sea la mente de las chicas. Digo esto, porque al menos una de ellas, es muy muy analítica. De hecho siempre pensé que acabaría dirigiendo una gran multinacional y tomando decisiones críticas con la cabeza muy fría. Y aquí es donde, si ella decide "pasar de relaciones" está condenando, no sólo a ella misma, sino a algún chico estupendo que pudiera haberla hecho muy feliz... Y se pierde la juventud de esta chica entre horas de messenger/facebook/teléfono, lloriqueando por una frustración (de la que no es tan fácil salir cuando se está dentro) y sin ánimos de salir del pozo. Y a mí eso me parece una lástima... Antes se metían a monja, pero eso hoy en día ya no se lleva.

Todo esto, partiendo de las bases de que las 3 chicas son de las que quieren un novio, boda, hijos... vamos, el pack completo. Y que no alcanzar esa situación les hace infelices por frustración. Ya les recomendaré el blog de Lorena para que vean que se puede ser feliz siendo single ;-)

En fin, que me ha llamado tanto la atención que quería comentarlo. Lo que me alucina de verdad es lo del efecto rebote y sus peligros (porque en pleno rebote, además del chico estupendástico, aparecerán unos cuantos buitres para acabar de rematar la faena)...

Bueno, ahora sí que ya es casi viernessssssssssssssss
Slaudos gentecilla



 

domingo, 2 de enero de 2011

Soul kitchen

Buenas noches queridos ciberlectores

Acabo de ver una película magnífica. Un guión realmente bueno: Soul kitchen. Es alemana con diversas colaboraciones (la productora se llama Corazón Internacional). Os la recomiendo muy mucho...

 
















No os quiero destripar la peli porque es muy buena y me gustaría que os sorprendiera. Está calificada como comedia y, bueno, tiene puntos realmente ingeniosos, aunque no espereis ver la típica comedia romántica estadounidense. En fin, que os escribo para hacer una reflexión que me ha surgido con la peli. Después de todo, tiene como protagonista un restaurante y eso se relaciona directamente con mi blog : )) Por cierto, que la banda sonora está a la altura de la película. Muy recomendable.


Uno de los personajes es una de esas personas BUENAS. Pero buenas buenas, de corazón. De esas que se encuentran ya poco. Y, ojo, no creo que sea una persona especialmente buena. Creo que en algún momento todos o casi todos somos así. Pero la experiencia vital, los golpes y zancadillas que la vida nos va poniendo, acaban por vencernos o, al menos, cambiarnos y nos convertimos en "menos buenos". Esto, en resumen. Sobre esto os recomiendo también el libro de Steve Dublanica, "Confesiones de un camarero", escrito a partir del blog Waiter Rant. Habla sobre la nobleza y vileza del ser humano en distintas situaciones reales.

Seguro que muchos de vosotros podeis contar esta historia en primera persona (o casi). Seguro que a muchos os han sucedido una serie de desgracias juntas. Además, siempre vienen acompañadas. Qué se yo, te van mal las cosas en el curro (o incluso te despiden), los amigos te dejan tirado, la familia es un asco y, para colmo, te deja la novia, se te muere un pariente querido, tienes problemas de salud... Apuesto a que pueden elegir 2 que les hayan sucedido simultáneamente de esta enumeración. Mucha gente solemos (en este grupo me incluyo) reaccionar con sentido del humor, poniendo la otra mejilla y diciendo un "venga, dame otra... si total, ya me da igual". Aunque no siempre. A veces reaccionamos (me vuelvo a incluir) mandando todo al carajo. Un "estoy harto" de tal o cual cosa. Alanis Morissette lo decía en una canción (Precious Illusions): I spent so much time living in survival mode. Pues de vez en cuando todos nos cansamos de vivir en modo supervivencia, ¿no?

Casi todos salimos a flote. Con más o menos tiempo y apoyos, seguimos adelante. La vida es fuerte y siempre se acaba abriendo camino. Pero la clave de lo que os cuento no está aquí. La verdadera bondad (como adjetivo calificativo) de las personas reside en cómo salen del pozo. La mayoría sale quemada, con heridas en el alma que acaban haciendo callo y nos "blindan" para futuras situaciones (de hecho, esto es un proceso natural en el cerebro humano). Cualquiera que haya experimentado un desengaño amoroso sabrá de qué estoy hablando. Algunos son capaces de sobreponerse a esas heridas y consiguen, con mucha autodisciplina, ser bastante parecidos a como eran antes. Y... les suelen dar en el mismo sitio : )) Y, los menos, las personas similares al protagonista de esta película, son completamente impermeables a estas señales. Quizá por eso existen mayoritariamente en la ficción. Aunque no siempre.

Tuve la fortuna y privilegio de tener un pariente así. Una prima de mi abuela. Fue una mujer sin grandes problemas en la vida, salvo la soledad. No tuvo hijos y su marido, a quien quiso más que a su vida, no era un ejemplo de marido modelo (por decirlo suavemente). Ella pasaba mucho tiempo sola y eso es algo que no llevaba bien. Confieso que hasta mi adolescencia no le hice mucho caso. Luego aprecié de verdad las largas charlas con ella, sobre la vida, sobre las gentes. Aprendí tanto. Quién mejor que alguien que ha vivido mucho para dar un punto de vista experto. Nunca me impartió lecciones. Ella únicamente hablaba y argumentaba, admitía opiniones. Ví cómo muchas veces sufrió injusticias por parte de algunas personas. En ocasiones realmente indignantes. Tanto que a mi espíritu adolescente le costaba asimilar y discutía con ella. Pero ella sabía apaciguarme dándome una confianza que no podría describir. Sólo con su mirada de ojos azules podía transmitir muchísimo. Y sabía cuándo había que "tragar" aunque fuera incomprensible para mí. Con los años he tenido que darle la razón y reconocer que con un mal menor consiguió un bien mayor. Lástima que no pueda decírselo ya...

En fin, que quisiera hacer una reflexión sobre lo mucho que nos envilecemos algunos a causa de los tropezones que damos en la vida. Lo difícil que es mantenerse puro en ese sentido y seguir dejando al descubierto el buen fondo de uno, aunque algunos desalmados puedan aprovecharse de ello. Supongo que merece la pena seguir siendo bueno... o intentarlo al menos.

Buena manera de empezar este 2011.