jueves, 5 de agosto de 2010

Motivo de creación

Hace mucho tiempo que tengo esta idea de crear un sitio público donde expresarme. Y es que creo que tengo mucho que aportar. No me malentendais, no soy una de esas personas endiosadas que pretenden que su palabra sea dogma, nada parecido siquiera. Pero sí es cierto que  tengo una mente muy analítica. Profesionalmente le he sacado mucho partido y, a juzgar por mis experiencias, no se me debe dar mal. Aplicar esta cualidad (que también es maldición) a las personas es un poco atrevido y no suele gustar. No pretendo criticar en el mal sentido de la palabra, sino sólo registrar mis impresiones e invitar a la reflexión.

Te invito a un cafE

Hace algunos años, mientras hacía mi proyecto fin de carrera, me tocó trabajar en casa. Que el entorno lúdico y el laboral coincidan resulta bastante peligroso. Por eso decidí imponerme algunas rutinas, como hacer deporte todas las tardes o mantener horarios más o menos estrictos. Entre esas obligaciones, me impuse salir a tomar café todas las tardes. Por evitar echarme la siesta y, sobre todo, por obligarme a salir a la calle todos los días y desconectar del entorno laboral-doméstico. De aquella, leía el periódico, conversaba con la camarera (acabamos siendo muy amigos) y resolvía pasatiempos, sobre todo los de ajedrez, que siempre me gustaron mucho. Me venía bien y me hacía sentir bien.

Pocos meses atrás he recuperado esta bonita costumbre, solo que ahora en lugar de hacerlo por la tarde, lo hago por las mañanas, a mitad de mañana. Y ahora vivo en una ciudad grande, con lo cual, hacerse amigo de la camarera es más complicado (¡todos los bares están llenos de gente!). Así que ahora me llevo un libro y leo. Pero no puedo evitar recibir información de mi entorno y observo, oigo y siento a la gente que tengo alrededor. Desde las propias camareras a los clientes que vienen solos o en grupo. Observo conductas, comportamientos. Incluso saco conclusiones aportando iguales dosis de imaginación y experiencia con la gente. Y he pensado que esta puede ser una buena manera de exponer estas ideas que me fluyen en el coco y que puede que a alguien entretengan. No es otra la finalidad, la de entretener y, quizá, hacer reflexionar un poquito a todos, que nunca está de más.

Así pues, ¿te tomas un café conmigo?. Yo invito...

4 comentarios:

  1. Pues me parece una idea genial. ¿Quién no ha hecho eso en una cafetería? Seguro que ya tienes miles de historias que contar para haberte lanzado con esto.
    Suerte y te seguiré.

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  2. Es una buena idea un blog sobre lo que ocurre en una cafetería. Cuando llevas un tiempo yendo a la misma acabas conociendo a la gente y acostumbrándote a sus rutinas, y cuando vas a varias, descubres personajes comunes a todas: el colega del camarero, los trabajadores que vienen a tomar el café de media mañana, las mamás que vienen de llevar a sus hijos del cole, el que va a su bola...

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  3. Hola Artemisa!

    Chas gracias por tu comentario y por que te guste la idea :) No te prives de aportar lo que se te ocurra.

    besos

    p.d. Por cierto, yo soy "el que va a su bola" :)))) jajajja

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  4. Hola Anónimo!

    Ufff... seguro que ya ni me sigues. Perdón por tardar tanto, he estado muy ocupado con causas y cosas de fuerza mayor :(

    En cualquier caso, sí, tengo muchas ideas. En cuanto me ponga un poco al día, iré publicando.

    Y gracias por seguirme!

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Adelante, expresa lo que piensas. Sólo te pediré que lo hagas con las 3 ces: Claridad, Concisión y Corrección. Vamos, que no me metas faltas ortográficas y que se pueda leer sin poner caras extrañas :)
un saludo y gracias!